Por qué una tarjeta vencida te puede hacer creer en las FinTech
Hace unas semanas, viví en carne propia lo absurdo del sistema bancario tradicional. Mi tarjeta de débito había vencido y, aunque casi no la uso, un comercio me exigió una física para pagar. “Fácil”, pensé. “Paso por el banco, la renuevo y listo”. Qué ingenuidad la mía. Fui a la sucursal, esperé mi turno y expliqué mi caso. Pero no. No podían darme una nueva tarjeta en ese momento. ¿La razón? Debían enviar un correo para solicitar una autorización. ¿Autorización para qué? ¡Era mi dinero! Aun así, me pidieron que esperara una llamada. Pasaron los días. Finalmente, sonó el teléfono, pero no era para decirme que mi tarjeta estaba lista. No. Me avisaron que me enviarían un correo… para pedirme más información. Tenía 72 horas para responder. Cuando llegó ese correo, apenas podía creerlo. Me pedían todo: mi actividad económica, […]



