Evo Morales no es el pueblo
Fiel a un estilo al que, más de 20 años después, nos hemos acostumbrado, Evo Morales ha utilizado la alta proporción de votos nulos en las elecciones del 17 de agosto para afirmar que se trata de un “triunfo del pueblo boliviano”. La afirmación sería coherente de no mediar un gran detalle: él considera que esa victoria radica en el casi 20 por ciento que alcanzó el voto nulo, propuesto como símbolo de la candidatura que no le permitieron concretar. Y es que Morales es el más astuto de los políticos en ejercicio, pues siempre lleva el agua a su molino. Cuando era candidato, condenaba el voto nulo y decía que quienes lo ejercieran serían “delincuentes confesos”. Ahora que ya no puede serlo, el voto nulo no solo deja de ser delincuencial, sino que se convierte en una manera legítima […]