Bolivia elevó su potencial narco
Veinte años de complicidad con las organizaciones narcotraficantes y de encubrimiento de la producción de drogas en territorio nacional han provocado que Bolivia se encuentre saturada de marihuana, cocaína —pasta base y clorhidrato—, alucinógenos y estupefacientes producidos no solo en las regiones tradicionalmente conocidas, sino también en zonas donde el Estado apenas tiene presencia. Una de las primeras constataciones de las nuevas autoridades antidrogas es que el potencial de producción de estupefacientes en Bolivia se ha elevado de manera casi exponencial durante las últimas dos décadas. Estamos literalmente atiborrados de droga. Las implicancias de esta realidad son extremadamente peligrosas, tanto por la violencia inherente al narcotráfico como por la expansión acelerada del crimen organizado en el país. Durante estos veinte años, quienes se dedican a la producción de narcóticos aprovecharon al máximo la permisividad del Estado. Hoy se constata que […]



