El V Congreso Internacional de la Soya analizará diversas temáticas para dar a conocer los avances tecnológicos en cuatro ejes temáticos: sostenibilidad, cambio climático, innovación y perspectivas de mercados.
Este evento se desarrollará después de tres años de ausencia forzada por la pandemia, contará con la participación de panelistas especialistas de Estados Unidos, Brasil, Argentina y Bolivia.
El evento se llevará a cabo el 4 y 5 de septiembre, en las instalaciones del salón Chiquitano de Fexpocruz, y representará una oportunidad para conocer los avances tecnológicos en cuatro ejes temáticos: sostenibilidad, cambio climático, innovación y perspectivas de mercados.
Fernando Romero, presidente de Anapo, expresó su expectativa por el congreso en una coyuntura preponderante como la que vive el país hoy. “Este encuentro permitirá que los productores, sean pequeños, medianos o grandes, además de técnicos de las propiedades y de la cadena productiva puedan conocer las recomendaciones técnicas desarrolladas para mejorar el manejo del cultivo y su productividad, con un enfoque de sostenibilidad y de resiliencia en medio del cambio climático”.
El V Congreso contará con la asistencia de más de 500 productores y técnicos, quienes podrán escuchar las disertaciones de expertos en diversas áreas como manejo de suelos, fertilización, control de malezas, plagas y enfermedades, biotecnología, tecnologías de aplicación, perdidas en cosecha, perspectivas de mercados y pronósticos de clima. El objetivo principal es abordar los desafíos y las oportunidades que enfrenta la cadena de producción de la soya hoy.
“La cadena productiva de la soya en Bolivia, a partir de su eslabón primario que son los productores, se enorgullece de posicionarse como un motor de desarrollo productivo y económico, gracias a su rol en la producción de alimentos estratégicos que garantizan el abastecimiento del mercado interno y generan excedentes en exportaciones y divisas”, destacó Romero.
La soya desempeña un papel esencial en la seguridad y soberanía alimentaria para Bolivia, además de su contribución importante para la reactivación económica. Este congreso no solo promete fortalecer estos aspectos, sino también proporcionar un espacio para la exploración de la biotecnología y su contribución potencial frente a los efectos del cambio climático, como la sequía. También la cita servirá para consolidar su aporte para avanzar hacia la soberanía energética con la producción de biodiesel, abriendo nuevas perspectivas hacia un desarrollo productivo, económico y sostenible para el país.