

Las sanciones de la ONU contra Irán por su falta de cooperación con el Organismo Internacional de Energía Atómica (OIEA) entran en vigor este sábado. La medida se produce después de que el Consejo de Seguridad rechazara este viernes una resolución presentada por Rusia y China que buscaba una prórroga de seis meses.
La reactivación automática de las sanciones, conocida como snapback, ocurrirá a las 8:01 hora local de Nueva York (12:00 GMT). El fracaso de la propuesta en el Consejo de Seguridad despejó el último obstáculo para su implementación.
El veto en el Consejo de Seguridad
La resolución impulsada por Rusia y China fue tumbada por cuatro votos a favor y nueve en contra, con dos abstenciones. La propuesta no logró reunir los nueve votos afirmativos necesarios para su aprobación.
La medida había sido promovida por las potencias europeas Francia, Alemania y Reino Unido (conocidas como el E3). Estos países argumentan que Teherán no ha cumplido con sus compromisos de limitar su programa nuclear, adquiridos en el acuerdo de 2015.
Posturas enfrentadas y alcance de las sanciones
El embajador adjunto de Rusia, Dmitri Polianski, acusó a los países occidentales de aplicar una «política hipócrita» y preferir el «chantaje» a la diplomacia. Afirmó que Irán ha actuado de manera constructiva con el OIEA.
Las sanciones de la ONU tienen como objetivo frenar el enriquecimiento de uranio y el programa de misiles de Irán. También autorizan inspecciones a aviones y buques, el congelamiento de activos económicos iraníes en el exterior y prohibiciones de viajar para individuos y entidades vinculadas al país.
Contexto del programa nuclear iraní
Irán sostiene que las sanciones deberían estar centradas en la no proliferación nuclear y no en su economía. El acuerdo nuclear de 2015 fue abandonado por Estados Unidos en 2018, y Teherán alega que las potencias europeas tampoco han cumplido con su parte del trato.
A pesar de las sanciones estadounidenses que limitan su comercio, Irán produce 4,8 millones de barriles diarios de crudo y exporta 2,6 millones, según un informe de junio de la Agencia Internacional de la Energía. La mayoría de estas exportaciones tienen como destino China.
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