El presidente Joe Biden anunció que, bajo sus órdenes, Estados Unidos ha procedido a evacuar a su personal gubernamental de Jartum y ha suspendido temporalmente las operaciones de la embajada en Sudán.
El mandatario señaló en un comunicado difundido por la Casa Blanca que Etiopía, Yibuti y Arabia Saudí fueron “decisivos” para que esa salida se produjera con éxito.
“Suspendemos temporalmente las operaciones de la embajada de Estados Unidos en Sudán, pero nuestro compromiso con los sudaneses y con el futuro que quieren no tiene fin”, añadió Biden en esa nota, donde dijo estar “orgulloso” del trabajo efectuado por el personal estadounidense en la legación diplomática.
Ayuda de paramilitares
El grupo paramilitar Fuerzas de Apoyo Rápido (FAR) de Sudán anunció este domingo que ayuda a las tropas estadounidenses a evacuar la Embajada de Washington en la capital Jartum, inmersa en la violencia.
“El comando de las Fuerzas de Apoyo Rápido coordinó con la misión de las fuerzas estadounidenses, consistente en seis aviones, para evacuar a diplomáticos y sus familias la mañana del domingo”, indicó en Twitter el grupo, que en la última semana enfrentó al ejército sudanés en un mortal conflicto.
Las FAR también aseguraron “su plena cooperación con todas las misiones diplomáticas para darles todos los medios de protección necesarias” para evacuar a su personal.
Estados Unidos, Corea del Sur y Japón desplazaron tropas a países vecinos, y la Unión Europea contempla hacer lo mismo para evacuar a sus diplomáticos y nacionales en Sudán.
La violencia se desató el 15 de abril entre el ejército del general Abdel Fatah al Burhane, gobernante de facto de Sudán desde el golpe de 2021, y su rival, el general Mohamed Hamdane Daglo, líder de las FAR.