

El entorno jurídico del expresidente Evo Morales expresó su rechazo a la decisión del Frente Para la Victoria (FPV) de dar por terminado el acuerdo político entre ambas fuerzas, al considerar que el procedimiento fue irregular por carecer de diálogo previo y anunciarse públicamente de manera sorpresiva.
Wilfredo Chávez, abogado del movimiento evista, afirmó que esta ruptura unilateral no afecta los esfuerzos que se realizan ante el Tribunal Supremo Electoral (TSE) para asegurar la participación en las elecciones del 17 de agosto. «Los acuerdos políticos no se disuelven con declaraciones a la prensa, sino mediante mecanismos formales de negociación», sostuvo Chávez en una entrevista con La Razón Radio. El jurista también cuestionó lo que calificó como una «reacción desproporcionada» del liderazgo del FPV.
El conflicto estalló tras el anuncio de Adrián Rodríguez, dirigente del FPV, quien justificó el fin de la alianza por declaraciones ambiguas de Morales sobre posibles negociaciones con otras organizaciones políticas. Desde el entorno del expresidente se aclaró que dichos comentarios no implicaban una ruptura del pacto firmado el 20 de febrero.
En este contexto, el evismo cuenta con la sigla Evo Pueblo, recientemente aprobada, aunque su registro definitivo aún está pendiente de resolución por el TSE. Esta incertidumbre llevó al movimiento a buscar inicialmente el respaldo del FPV como instrumento político temporal, una estrategia que ahora deberá replantearse.
Chávez adelantó que el equipo legal analizará si la terminación del convenio cumple con la normativa vigente, sin descartar acciones legales contra la decisión del FPV. Asimismo, señaló que se evalúan nuevas alianzas para garantizar la participación electoral.
Este episodio refleja las crecientes fracturas dentro de la oposición boliviana rumbo al proceso electoral. La falta de coordinación y los desencuentros públicos podrían redibujar el mapa de alianzas políticas. Mientras el FPV decide si competirá de forma independiente o buscará nuevos socios, el evismo enfrenta el reto de consolidar su estructura partidaria bajo plazos ajustados y un complejo panorama jurídico.
Próximos pasos
Los días venideros serán clave para ambas fuerzas. El equipo de Morales deberá optar entre intensificar la vía legal o agilizar la oficialización de Evo Pueblo. Por su parte, el FPV tendrá que demostrar si su ruptura obedece a una estrategia electoral sólida o a divisiones internas que podrían mermar su influencia. En un escenario político históricamente volátil, Bolivia se adentra en un nuevo capítulo de incertidumbre rumbo a las urnas.
Sé el primero en dejar un comentario