
El comandante general de la Policía Boliviana, Mirko Sokol, informó este lunes que ordenó supervisar todos los operativos de Diprove y cerrar comisarías ilegales de Tránsito en el país. Las decisiones fueron asumidas durante su primer fin de semana en el cargo, luego de ser posesionado el pasado viernes.
Sokol explicó que las acciones responden a la necesidad de evitar abusos y extorsiones contra la población, especialmente en operativos nocturnos y fines de semana.
Cierre de comisarías ilegales de Tránsito
El jefe policial detalló que la primera medida de su gestión es la clausura de puestos de control no autorizados que funcionaban en distintos puntos del territorio nacional.
Según Sokol, varios de estos lugares estaban instalados en zonas alejadas o sin funciones legítimas, donde algunos funcionarios habrían aplicado cobros indebidos a los conductores.
“Todas estas comisarías están siendo cerradas por instrucción mía; estamos esperando el informe final para saber cuántas comisarías están siendo cerradas”, indicó.
Las actividades de control quedarán restringidas únicamente a las unidades oficiales de Tránsito reconocidas por el Comando General.
Revisión y posibles sanciones
Una vez concluido el cierre de estos puntos, la Policía verificará desde cuándo operaban y quiénes autorizaron su instalación. Sokol adelantó que se evaluará la apertura de procesos penales o administrativos contra los responsables.
Supervisión obligatoria en operativos de Diprove
Otra disposición inmediata instruye que todo operativo de Diprove cuente con la presencia obligatoria de Inspectoría y unidades de Transparencia.
El comandante explicó que, en reiteradas ocasiones, grupos de Diprove realizaban operativos sin reportar a sus directores, operando de madrugada en calles y carreteras para detectar vehículos indocumentados o ilegales.
Sokol advirtió que en esos operativos “se aprovechaban para extorsionar a los conductores y permitir que esos vehículos continúen circulando”.
La autoridad garantizó que esta práctica no volverá a ocurrir bajo su administración.
Compromiso institucional
Sokol destacó que la mayoría de los policías del país cumple con su labor, pero enfatizó que quienes actúen movidos por intereses personales deberán someterse a la normativa y enfrentar las consecuencias.
Con estas medidas, la nueva jefatura policial busca restablecer el control institucional, frenar irregularidades y reforzar la confianza de la población en la Policía Boliviana.



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