

Este viernes, Alcira Carola Arraya fue nombrada como la nueva viceministra de Seguridad Ciudadana, convirtiéndose en la primera mujer en ocupar este cargo en Bolivia. La posesión estuvo a cargo del ministro de Gobierno, Roberto Ríos Sanjinés, en un acto que destacó su trayectoria y compromiso con la seguridad y la justicia social.
Un compromiso con la democracia y la equidad
En su primer discurso, Arraya agradeció al presidente Luis Arce por la confianza depositada en ella y enfatizó su compromiso con la estabilidad democrática, especialmente en un contexto de polarización política.
«Vivimos tiempos de alta tensión, con posiciones radicales que buscan vulnerar el derecho a un proceso electoral seguro. Asumo esta responsabilidad con la convicción de defender la democracia», declaró.
Además, destacó que su gestión priorizará una perspectiva de género, históricamente ausente en las políticas de seguridad:
«La voz de las mujeres ha estado invisibilizada en estos espacios. Hoy avanzamos hacia una gestión más inclusiva y cercana a las realidades que no se ven desde los escritorios».
Enfoque integral: seguridad más allá de la fuerza policial
Arraya señaló que su plan no se limitará a la presencia policial, sino que incorporará prevención, educación y apoyo a víctimas:
«Trabajaremos con la Policía, organizaciones sociales, comunidades y todos los niveles del Estado para una seguridad integral».
También exigió a la institución policial eficiencia operativa y un compromiso con la transformación de prácticas institucionales.
Trayectoria y reconocimientos
Arraya es ingeniera química de formación y cuenta con una amplia experiencia política:
- Fue senadora suplente por Cochabamba (2015-2020).
- Dirigente universitaria, de organizaciones de mujeres y vecinales.
- Se desempeñó como directora de Lucha contra la Trata y Tráfico de Personas en el Ministerio de Gobierno.
En su discurso, agradeció a su familia y a figuras como el exministro Eduardo Del Castillo, con quien colaboró en la lucha contra la trata de personas.
La designación de Arraya marca un hito en la inclusión de mujeres en roles clave de seguridad. Sus desafíos incluyen reducir la violencia, garantizar elecciones pacíficas y consolidar una estrategia con enfoque de género y justicia social.
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