Las organizaciones sociales pidieron este lunes al Gobierno central, en una mesa de trabajo en la capital cruceña, la decisión política de convocar a una reunión nacional para definir la fecha del Censo de Población y Vivienda desde una revisión técnica y de esta manera viabilizar la salida al conflicto que se vive en el departamento de Santa Cruz, que cumple su tercer día de paro indefinido.
El secretario ejecutivo de la Central Obrera Departamental (COD) de Santa Cruz, Rolando Borda, fue el encargado de formalizar el pedido en la reunión con los ministros de la Presidencia y de Planificación del Desarrollo, María Nela Prado y Sergio Cusicanqui, respectivamente; además del vocero presidencial, Jorge Richter.
“La propuesta de las organizaciones de Santa Cruz es que de forma inmediata haya la decisión política de convocar a una reunión nacional de todos los actores y sea ese escenario el que reconduzca el trabajo técnico del censo. Si hay posibilidad de adelantarlo, magnífico”, dijo el dirigente, quien condicionó la modificación de la fecha a que se haga “desde una revisión técnica” y en una reunión con los representantes y autoridades de los nueve departamentos del país.
Al respecto, la ministra Prada indicó que como Gobierno “recogemos la propuesta de que se haga un encuentro entre todos los departamentos, un encuentro donde estén los representantes y autoridades de los nueve departamentos”.
En la mesa de trabajo también se propuso que en ese encuentro nacional por el censo los pueblos indígenas sean los mediadores del diálogo.
El secretario ejecutivo de la Federación Sindical Única de Trabajadores Campesinos de Santa Cruz, Franklin Vargas, manifestó que las organizaciones tienen que ser garantes de ese proceso.
“Saludamos el planteamiento de los pueblos indígenas que como representantes de una cultura de paz y cultura de consenso se ofrecen como mediadores”, señaló la ministra de la Presidencia.
Sobre el pedido de que sea la Iglesia Católica la mediadora en el diálogo, la ministra aseguró que esto se aceptará siempre y cuando los representantes religiosos no tomen posición política y demuestren “que estén al servicio de los más pobres”.