El senador del Movimiento Al Socialismo (MAS) Leonardo Loza, uno de los incondicionales de Evo Morales en el Senado, reveló que antes los proyectos de ley enviados desde el Ejecutivo ingresaban “a la carrera” y en 20 minutos se aprobaban, pero ahora, con el clima de división dentro del partido, aseguró que eso ya no ocurrirá.
La Cámara de Diputados prevé sesionar esta jornada para considerar la aprobación o no del proyecto de ley del Presupuesto General del Estado (PGE) 2023 que la pasada semana fue rechazado en su estación en grande por los legisladores “evistas” del MAS y la oposición.
“Ahora (los renovadores o “luchistas”) están pagando las consecuencias de haber dividido a la bancada del MAS en la Cámara de Diputados. Y los ministros, lamentablemente, se han acostumbrado a ingresar proyectos de ley a la carrera (para que) faltando 20 o 30 minutos se aprueben, eso ya no va a ocurrir ahora. Todo tiene que revisarse como tiene que ser, eso va tener ese tipo de problemas y este tipo de dificultades”, advirtió el senador oficialista al Ejecutivo.
El artículo 135 del reglamento de la Cámara de Senadores establece que todos los proyectos de Ley deben ser distribuidos entre los senadores 24 horas antes de su tratamiento y con el informe de la comisión respectiva. Según el senador Loza los proyectos de Ley del Ejecutivo ingresaban 20 minutos antes, incluso sin informe de comisión.
Esa misma condición debe cumplirse en la Cámara de Diputados porque el artículo 75 de su reglamento también obliga a que los parlamentarios conozcan los proyectos 24 horas antes de su tratamiento. Los asambleístas opositores denunciaron en diversas ocasiones que trataron leyes sin conocerlas y la mayoría masista imponía su voto. El senador Loza confirmó esas denuncias la pasada jornada.
“Nosotros hemos aguantado, nunca hemos criticado. A (tope de) la hora nos hacen llegar el proyecto, a la carrera. Estamos considerando, estamos aprobando, pero nadie nos reconoce ese trabajo, y ahora que (los evistas) piden mayor información, mayor amplitud, mayor detalle, nos hablan de boicot. Yo creo que eso no está acorde”, indicó Loza.
Cada día los medios de comunicación constatan más detalles de la fractura política que se registra al interior del MAS en el Legislativo entre “evistas” o “ala dura”, que son leales a Morales, y los “renovadores” o “luchistas”, seguidores del presidente Luis Arce. Esta división del partido azul se profundizó más desde la aprobación de la Ley de aplicación de resultados del censo.