La exportación de carne bovina no pone en riesgo el abastecimiento interno ni la calidad del producto, aseguró Jorge Silva, viceministro de Defensa de los Derechos del Usuario y del Consumidor. Tras una reunión con la Federación de Ganaderos de Santa Cruz (Fegasacruz), Silva enfatizó que las exportaciones, principalmente dirigidas a China, generan divisas significativas para Bolivia y no afectan el mercado local.
Sin embargo, la Confederación Nacional de Trabajadores en Carne de Bolivia (Contracabol) mantiene un paro indefinido en protesta por el alza del precio del kilo gancho y la continuidad de las exportaciones, lo que ha generado preocupación en distintos sectores.
La postura del Gobierno y los ganaderos
Según Silva, las exportaciones de carne han sido limitadas para proteger el mercado interno. Rechazó afirmaciones de que los envíos al exterior superen las 80 mil toneladas métricas, destacando que el objetivo para 2024 es alcanzar las 35 mil toneladas.
“Los ganaderos han ratificado su compromiso de garantizar el abastecimiento interno según la demanda”, aseguró el viceministro, quien también destacó que el control de calidad está garantizado por el Servicio Nacional de Sanidad Agropecuaria e Inocuidad Alimentaria (Senasag). Por su parte, los productores descartaron las acusaciones de Contracabol sobre el envío de carne de menor calidad al mercado local.
Protestas por el alza de precios
Contracabol, que representa a los comercializadores de carne, denunció que el precio del kilo gancho ha subido a niveles de entre Bs 31 y Bs 35 en regiones como La Paz, Oruro, Chuquisaca y Potosí, muy por encima del rango comprometido por el Gobierno, de Bs 22 a Bs 24,50.
El secretario de Conflictos de Contracabol, Gonzalo Serrudo, afirmó que el 70% de la carne producida en Bolivia se destina a la exportación, dejando solo el 30% para el mercado interno. Advirtió que la protesta se intensificará en los próximos días y que otros sectores, como los comerciantes de carne de pollo, podrían unirse a las movilizaciones.
Para abordar la crisis, Silva anunció una reunión que se llevará a cabo entre el jueves y viernes en Santa Cruz. A este encuentro asistirán delegados de Contracabol, representantes del sector ganadero, frigoríficos, empresarios y autoridades gubernamentales, con el objetivo de llegar a un acuerdo sobre los precios y la distribución de la carne en el mercado local.
Consumidores enfrentan las consecuencias
Mientras tanto, los consumidores ya están sufriendo las consecuencias del paro, con reportes de desabastecimiento de carne en varios mercados del país. La resolución del conflicto será crucial para evitar un impacto mayor en la economía familiar y en la cadena productiva, especialmente en un país donde la carne es un alimento esencial.
Este conflicto pone de manifiesto las tensiones entre las políticas de exportación, el abastecimiento del mercado interno y las demandas del sector comercializador. Resolver estas disputas requiere medidas integrales y de largo plazo que garanticen tanto la sostenibilidad del sector cárnico como la seguridad alimentaria en Bolivia.