Los seguidores de Evo Morales, agrupados en el denominado “pacto de unidad”, entregaron este jueves un pliego de 12 puntos al Gobierno, solicitando una respuesta en un plazo máximo de 72 horas. La vicepresidenta de los interculturales, Elizabeth Paco, destacó que, en caso de no recibir una respuesta positiva, las movilizaciones se intensificarán.
Elizabeth Paco, vicepresidenta de los interculturales, declaró que permanecerán en vigilia mientras esperan una solución. “Son diferentes pliegos petitorios y deben responder en 72 horas. Durante este tiempo estaremos en vigilia. Si cumplen, nos retiraremos a nuestras regiones; de lo contrario, masificaremos las movilizaciones”, afirmó Paco ante los medios.
Entre las principales demandas destacan la regulación de la canasta familiar, el abastecimiento de combustibles y la libre circulación del dólar, problemas que, según los manifestantes, afectan directamente a la mayoría de los bolivianos. Paco también denunció que, durante las recientes protestas, se han registrado gasificaciones, disparos con balines y más de 40 detenciones, lo que calificó como violaciones a los derechos de los manifestantes.
Mari Luz Ventura, otra dirigente de los interculturales, aseguró que las demandas reflejan el sentir del pueblo boliviano, especialmente ante el alza de precios de los productos básicos. “Nos quieren matar de hambre”, expresó Ventura, destacando la gravedad de la crisis económica que enfrentan muchas familias.
La movilización, iniciada el lunes pasado desde Patacamaya —a más de 90 kilómetros de La Paz—, llegó esta semana a las cercanías de la plaza Murillo. Sin embargo, los manifestantes no lograron ingresar al centro de la ciudad debido a un fuerte operativo policial que recurrió al uso de gases lacrimógenos para dispersarlos.
Los dirigentes del movimiento insisten en que las respuestas deben provenir directamente del presidente Luis Arce, y no de sus ministros. Mientras tanto, anunciaron que mantendrán una vigilia pacífica hasta obtener una respuesta. No obstante, advirtieron que, si no se atienden sus demandas, las medidas de presión podrían intensificarse en los próximos días.