El vicepresidente David Choquehuanca advirtió este miércoles que el Estado Plurinacional aún no ha logrado consolidar una institucionalidad propia y sigue operando sobre “cimientos coloniales” que frenan su transformación y profundización. Según el mandatario, las estructuras jerárquicas y piramidales de los órganos Ejecutivo, Legislativo, Judicial y Electoral dificultan el avance hacia un modelo verdaderamente descolonizador.
“El Estado Plurinacional es una construcción postcolonial, pero la gestión pública continúa regida por herramientas como la Ley Safco, que son coloniales, republicanas y neoliberales. Estas normas retrasan, corrompen y burocratizan el sistema”, señaló Choquehuanca durante su intervención, en un análisis crítico sobre los desafíos que enfrenta el proceso de cambio.
Obstáculos en la consolidación del modelo descolonizador
El vicepresidente hizo énfasis en que la “naturalización” del Estado Plurinacional sigue siendo una tarea pendiente. A su juicio, la justicia está “desnaturalizada” y persiste una mentalidad de dominación. “Todos quieren gobernar a otros, pero nadie valora ni explora el poder que posee dentro de sí mismo”, reflexionó.
Choquehuanca también lamentó que, pese a algunos avances hacia la descolonización, no se han establecido los pilares fundamentales del Estado Plurinacional que plantea la Constitución. Además, criticó que las estructuras vigentes incrementan la burocracia y reducen la eficacia en la gestión pública, obstaculizando el cumplimiento de los objetivos del modelo.
La propuesta del pensamiento circular
En su discurso, el vicepresidente defendió la adopción del pensamiento circular como un enfoque clave para reorganizar las estructuras sociales, políticas e institucionales del país. “La lógica circular no jerarquiza; garantiza la rotación de cargos, mantiene la unidad y evita que alguien someta a otro”, explicó.
Choquehuanca planteó que el sistema de organización circular originaria podría ser una solución viable para construir una sociedad verdaderamente pluralista, donde ninguna norma ni idea se imponga sobre las demás. Este modelo, aseguró, fomentaría el equilibrio entre las diversas formas de pensamiento y organización presentes en Bolivia.
El vicepresidente cerró su intervención instando a reflexionar sobre los cambios estructurales necesarios para que el Estado Plurinacional alcance su institucionalidad plena. Solo así, dijo, podrá cumplir con las aspiraciones de una sociedad más justa, plural e inclusiva.