El Tribunal Supremo Electoral (TSE) de Bolivia recibió una solicitud formal de anulación de la personería jurídica del Movimiento Al Socialismo (MAS), presentada por el diputado opositor Jairo Guiteras, de Comunidad Ciudadana (CC). Este pedido se basa en la supuesta implicación del partido liderado por Evo Morales en actos sediciosos, de terrorismo y en la toma de instalaciones militares, eventos que, según el legislador, infringen la Ley de Organizaciones Políticas. Guiteras presentó documentación que, según él, confirma la participación institucional del MAS en estos actos.
De acuerdo con el artículo 58 de la mencionada ley, el TSE tiene la obligación de cancelar la personalidad jurídica de cualquier partido o agrupación que participe de manera institucional en golpes de Estado, actos de sedición o acciones separatistas. Guiteras afirmó que los recientes bloqueos promovidos por sectores afines al MAS en diversas rutas del país incluyeron episodios violentos que constituyen pruebas suficientes de la vinculación del partido con estas acciones.
Según el legislador, existen documentos y pruebas que sugieren un vínculo directo entre Evo Morales y las personas detenidas por delitos de terrorismo en el contexto de estos bloqueos. Además, Guiteras denunció que Morales habría defendido la toma de cuarteles en el trópico de Cochabamba, calificándolas como “vigilias” pese a que, según él, fueron tomas violentas en las que incluso hubo rehenes en las instalaciones militares.
El TSE cuenta ahora con un plazo de 14 días para analizar la solicitud y emitir una resolución. Si el pedido resulta procedente, la personería jurídica del MAS podría ser anulada, lo que impediría al partido participar en futuras elecciones. “No estamos pidiendo otra cosa sino el cumplimiento de la ley”, subrayó Guiteras, quien enfatizó la importancia de que el TSE actúe con imparcialidad y en apego a las pruebas presentadas.
Este proceso plantea implicaciones políticas significativas en el escenario electoral boliviano, ya que una eventual cancelación de la personería jurídica del MAS reconfiguraría el panorama de los partidos políticos en el país. Además, genera un nuevo foco de tensión entre el Gobierno, la oposición y el TSE, que deberá evaluar cuidadosamente la validez y las implicaciones de esta solicitud para emitir una decisión fundamentada y ajustada a la ley.