ABC.- Tal y como se temía, ni siquiera la Navidad ha permitido establecer un paréntesis de paz en la guerra de Ucrania. Según denunciaban este domingo las autoridades país, al menos 16 civiles murieron y 64 personas resultaron heridas durante la noche del día 24 en un bombardeo contra la región de Jersón, cuya capital fue liberada por las tropas ucranianas en noviembre como resultado de la contraofensiva iniciada al sur del país a finales de verano.
Pero ese nuevo hostigamiento en unas fechas tan especiales tampoco ha logrado debilitar la voluntad del presidente de Ucrania, Volodímir Zelenski, de obtener la victoria. Así lo transmitió a través de un mensaje navideño en el que afirmaba que el Ejército seguirá luchando “por liberar a todos los ucranianos”. “Ningún avión kamikaze es capaz de apagar la aurora de Navidad. Veremos su resplandor incluso bajo tierra en un refugio antiaéreo. Llenaremos nuestros corazones de calor y luz”, dijo Zelenski.
Aunque los ucranianos son mayoritariamente cristianos ortodoxos y en el pasado celebraban la Navidad el 7 de enero -tal y como queda establecido por el calendario juliano, seguido por la iglesia ortodoxa rusa y, por lo tanto, por el amigo del Kremlin y belicoso Patriarca de Moscú-, muchos han decido dar un nuevo paso y festejar el nacimiento de Cristo el día 25, como se hace en la mayoría del mundo en virtud del calendario gregoriano. Aunque parece un gesto insignificante, en realidad revela una vez más el convencimiento de los ciudadanos de Ucrania de romper cualquier vínculo que les una con el país vecino.
Los ucranianos tratan de recuperar pequeños gestos de normalidad mientras el conflicto se enquista en el tiempo
Putin intenta justificarse
Frente a esa voluntad de independencia y rechazo al invasor, el presidente de Rusia, Vladímir Putin, afirmó en una entrevista cuyo contenido se ha dado a conocer este domingo que el deseo de Occidente es dividir la «Rusia histórica», un término ambiguo con el que el mandatario pretende sugerir que Rusia y Ucrania pertenecen, en realidad, a un mismo pueblo, y con el que trata de justificar la invasión que lanzó el pasado 24 de febrero.
“Todo se fundamenta en la política de nuestros adversarios geopolíticos, que buscan dividir a Rusia, la Rusia histórica”, dijo Putin. “Estamos actuando en la dirección correcta, estamos protegiendo nuestros intereses nacionales, los intereses de nuestros ciudadanos, de nuestro pueblo”, añadió. Además, el presidente ruso también explicó que su país está abierto a mantener negociaciones para poner fin al conflicto, y acusó a Kiev y Washington de dinamitar esas posibles conversaciones de paz.
Sin embargo, como recordaba Reuters en un teletipo, el director de la CIA, William Burns, denunciaba en una reciente entrevista que Rusia todavía no había mostrado predisposición a encontrar una solución negociada que acabe con la guerra.