La estatal Yacimientos Petrolíferos Fiscales Bolivianos (YPFB) proyecta cerra el 2022 con una renta petrolera de $us 2.970 millones que beneficiará a universidades públicas, gobernaciones y alcaldías; así como a instituciones que desarrollan obras en infraestructura, educación y salud.
El presidente ejecutivo interino de YPFB, Armin Dorgathen, dijo al referirse al tema, que la nueva adenda de contrato de compraventa de gas natural firmada en agosto entre YPFB y Petrobras, permitió generar mayores ingresos económicos adicionales.
“Esto nos permitirá generar 200 a 250 millones de dólares adicionales a lo presupuestado de renta petrolera”, indicó el ejecutivo de la estatal petrolera a manera de evaluación al cumplirse este 23 del mes en curso el primer año de su gestión.
Dorgathen recordó que la octava adenda suscrita por el gobierno de Jeanine Áñez contempló la reducción de volúmenes contractuales de 30 a 20 millones de metros cúbicos día (MMmcd) y el pago del transporte por parte de Bolivia.
Según el presidente de YPFB, esto generó a Bolivia una pérdida de $us 120 millones, pero luego de arduas negociaciones se logró recuperar o compensar este daño.
16 años de renta petrolera
Yacimientos Petrolíferos Fiscales Bolivianos registra una renta petrolera de $us 45.808 millones desde la gestión 2006, año de la nacionalización de los hidrocarburos. El proceso estableció la recuperación de los recursos naturales a favor de los bolivianos.
La renta petrolera está conforma por el Impuesto Directo a los Hidrocarburos (IDH), regalías, patentes e impuestos y la participación de YPFB. Los recursos son reinvertidos en proyectos establecidos en el upstream y downstream. Adicionalmente aportan a la reactivación económica.
Desde que se decretó la nacionalización de los hidrocarburos, en mayo de 2006, YPFB benefició a las regiones del país con recursos económicos por concepto de pago de Impuesto Directo a los Hidrocarburos (IDH), Impuestos Upstream y otros, en función a la normativa vigente.