La estatal Yacimientos Petrolíferos Fiscales Bolivianos (YPFB) avanza en el desarrollo de cuatro proyectos estratégicos para la producción de hidrógeno verde (H₂V) en las regiones de Entre Ríos, Río Grande, Warnes y Villa Montes. Estas iniciativas buscan aprovechar recursos naturales e infraestructura local para posicionar al país como un actor clave en la transición energética y reducir la dependencia de combustibles importados.
El director de Evaluación y Control de Proyectos de YPFB, Jorge Ríos Urquidi, informó que la empresa se encuentra diseñando “hubs de hidrógeno verde” que se ubicarán en zonas estratégicas con abundante disponibilidad de agua y proximidad a usuarios industriales. Los estudios de factibilidad, que definirán la viabilidad técnica y económica de los proyectos, estarán listos para el tercer trimestre de 2025.
“Bolivia debe desarrollar una infraestructura integrada para la producción de hidrógeno verde, combinando el uso de gas natural, el Sistema Interconectado Nacional (SIN) y nuevas capacidades de energía renovable”, señaló Ríos Urquidi durante su participación en el Foro Internacional de Hidrocarburos, Fertilizantes, Energías Renovables y Alternativas, realizado en Santa Cruz.
Ubicación estratégica de los hubs
Cada uno de los cuatro hubs está diseñado para aprovechar instalaciones y recursos ya existentes, optimizando costos y tiempos de desarrollo:
- HUB Entre Ríos: Cercano a la Planta de Amoniaco y Urea.
- HUB Río Grande: Próximo a la Planta de Separación de Líquidos Río Grande.
- HUB Warnes: Ubicado en las inmediaciones de la Planta de Gas Colpa.
- HUB Villa Montes: En las cercanías de la Planta de Procesamiento de Gas La Vertiente.
En conjunto, estos proyectos tienen una capacidad de producción estimada en 420 toneladas diarias de hidrógeno verde, dependiendo de la disponibilidad de energía renovable y la capacidad del sistema eléctrico nacional.
El hidrógeno verde como eje de descarbonización
El hidrógeno verde, producido mediante electrólisis alimentada con fuentes de energía limpia como la solar, eólica o hidráulica, es considerado una solución clave para descarbonizar sectores industriales y gestionar los excedentes de energía renovable.
YPFB confía en que estas iniciativas no solo reducirán la dependencia de combustibles fósiles, sino que también sentarán las bases para una matriz energética más sostenible y competitiva. Este esfuerzo forma parte de una estrategia más amplia para integrar a Bolivia en las cadenas globales de valor vinculadas a la transición energética.
Con estos proyectos, el país busca consolidarse como un líder regional en el desarrollo y exportación de energías limpias, enfrentando los retos del cambio climático y promoviendo un futuro energético más resiliente.