Este lunes se reinstalará el juicio oral del caso denominado Golpe I, relacionado con la crisis política y social que vivió Bolivia en 2019. Entre los principales acusados figuran el gobernador de Santa Cruz, Luis Fernando Camacho, y el exdirigente cívico Marco Antonio Pumari, además de otras exautoridades vinculadas a los hechos.
La audiencia estaba prevista para las 08:30 de la mañana en el Tribunal de Justicia de La Paz, según confirmó el abogado defensor de Camacho, Martín Camacho, en declaraciones a Unitel. El gobernador cruceño llegó al edificio judicial a las 06:30, mientras que hasta ese momento Pumari no había hecho su ingreso.
El ministro de Justicia informó en días anteriores que el proceso judicial se encuentra en su etapa final y que podría dictarse sentencia en las próximas semanas. Sin embargo, el abogado Martín Camacho refutó esta afirmación, asegurando que el juicio aún está en fase de presentación de pruebas, lo que podría prolongar considerablemente la duración del proceso.
“Literalmente, esto recién está comenzando. Esperamos escuchar las pruebas del Ministerio de Gobierno y presentar nuestras exclusiones probatorias, tal como hicimos en las dos últimas audiencias”, declaró el abogado defensor.
El caso tiene su origen en las movilizaciones ciudadanas ocurridas entre octubre y noviembre de 2019, desencadenadas por denuncias de fraude electoral que culminaron con la renuncia del entonces presidente Evo Morales. El juicio, que comenzó el 17 de octubre pasado, incluye cargos contra Camacho y Pumari por los presuntos delitos de terrorismo, conspiración y cohecho activo. Ambos permanecen en detención preventiva en diferentes centros penitenciarios.
El avance del proceso es seguido de cerca por diversos sectores del país, debido a las profundas implicaciones políticas y sociales que conlleva. Mientras la defensa insiste en la falta de pruebas sólidas para sustentar las acusaciones, el Gobierno mantiene su postura sobre la gravedad de los hechos investigados.