Un contingente de 100 efectivos de la Fuerza Especial de Lucha Contra el Narcotráfico (Felcn) retomó este martes el control del puesto Castillo, en Villa Tunari, tras permanecer 100 días bajo ocupación de seguidores del expresidente Evo Morales. La recuperación del recinto, considerado estratégico en la lucha contra el narcotráfico, se llevó a cabo mediante un operativo que movilizó 20 patrullas y permitió reanudar las labores de interdicción en la denominada “zona roja” de producción de drogas, informó el ministro de Gobierno, Eduardo Del Castillo.
“Se informa a la población que se movilizaron 100 efectivos policiales de la Felcn al municipio de Villa Tunari, provincia Chapare, para retomar las labores de interdicción al narcotráfico en la tranca el ‘Castillo’. Este lugar es conocido por ser el ingreso a la denominada ‘zona roja’. Los controles en esta tranca evitarán la salida e ingreso de sustancias controladas” escribió el ministro en sus redes sociales.
El puesto Castillo fue tomado el 27 de octubre de 2023 por un grupo afín a Morales, en respuesta a un fallido operativo policial que buscaba capturar al exmandatario, investigado por delitos como trata y tráfico de personas y estupro. Durante la toma, los manifestantes irrumpieron en instalaciones militares, sustrajeron vehículos y obligaron a efectivos a grabar videos para frenar operativos. Horas después, ocuparon el puesto de control, que permaneció bajo su dominio hasta este martes.
Por su parte, el viceministro de Defensa Social, Jaime Mamani, destacó que la recuperación del puesto permitirá restablecer las labores de interdicción en un punto clave para el control del tráfico de sustancias ilícitas. “Este lugar es la puerta de ingreso a la denominada zona roja del narcotráfico”, afirmó.
Durante los 100 días de ocupación, las instalaciones fueron saqueadas por completo. Computadoras, equipamiento, muebles, catres y colchones desaparecieron, e incluso se reportó el robo de puertas y marcos de ventanas. Imágenes difundidas por el Viceministerio de Defensa Social evidencian el estado de abandono y destrucción en que quedó el puesto.
Según fuentes policiales, se han presentado tres denuncias relacionadas con la toma del recinto, la última hace tres semanas. Los principales acusados son dirigentes cocaleros afines a Morales, señalados por instigar la ocupación. La Fiscalía investiga el caso por siete delitos, entre ellos asociación delictuosa, hurto, usurpación de funciones y robo agravado. No obstante, el avance de las pesquisas se ha visto obstaculizado por el hostigamiento a fiscales en la zona.
La Felcn intentó recuperar el puesto en dos ocasiones anteriores, pero vecinos de Villa Tunari impidieron el acceso de los efectivos. En esta oportunidad, el operativo se ejecutó sin enfrentamientos. “Las 30 personas que aún permanecían en el puesto de control se retiraron al ver el despliegue policial”, explicó Mamani.
La recuperación del puesto el Castillo representa un avance en la lucha contra el narcotráfico en una región considerada bastión político de Morales y clave en la producción de drogas. El desafío ahora será garantizar la seguridad de los efectivos y fiscales en la zona, así como avanzar en las investigaciones para procesar a los responsables de la toma.