El Complejo Siderúrgico del Mutún ha iniciado la producción de sus primeras barras corrugadas y alambrón, en el marco de las pruebas con carga de su planta, considerada una obra emblemática rumbo al Bicentenario de Bolivia. Este avance representa un paso crucial en la industrialización del acero en el país.
Jorge Alvarado Rivas, presidente de la Empresa Siderúrgica del Mutún (ESM), confirmó el comienzo de la etapa de pruebas con carga. “Ya hemos iniciado la puesta en marcha, lo que implica realizar pruebas en vacío y con carga en las distintas plantas. Actualmente, estamos obteniendo el producto final: barras corrugadas y alambrón, aunque aún en fase de prueba”, señaló.
Las pruebas iniciales incluyeron ajustes en los equipos para garantizar tanto la calidad como la cantidad del producto. Las barras corrugadas y el alambrón, que emergen al rojo vivo de los hornos de la Planta de Laminación, simbolizan el arranque de esta nueva era para la siderurgia boliviana.
Producción en ascenso
Alvarado aclaró que la producción actual es de carácter experimental y aún no está destinada al mercado. Sin embargo, proyectó que una vez la planta opere a plena capacidad, comenzará con una producción inicial de 5.000 toneladas mensuales, que se incrementará de forma progresiva.
“El acero es un pilar del desarrollo de cualquier país. Este complejo siderúrgico tiene un profundo significado, ya que marca la entrada de Bolivia en la era de la industrialización”, destacó el presidente de la ESM.
Infraestructura y beneficios
El Complejo Siderúrgico del Mutún está compuesto por siete plantas clave: Concentración, Peletización, Reducción Directa del Hierro (DRI), Acería, Laminación, una Central Eléctrica y plantas Auxiliares. Las primeras cinco forman el núcleo de la cadena productiva.
Cuando alcance su máxima capacidad operativa, el complejo podrá producir aproximadamente 200.000 toneladas anuales de barras corrugadas y alambrón, destinadas al mercado interno. Esto permitirá reducir hasta un 50 % las importaciones de acero, fortaleciendo la industria nacional y contribuyendo a la balanza comercial del país.
Además, el proyecto generará alrededor de 700 empleos directos y más de 2.000 indirectos, consolidando la política de industrialización promovida por el presidente Luis Arce Catacora.
La inauguración oficial del complejo será programada en coordinación con la Presidencia del Estado Plurinacional de Bolivia. Este hito posiciona al país en el camino hacia la autosuficiencia en la producción de acero, sentando las bases para un desarrollo industrial sostenible que impulsará el crecimiento económico y la modernización del sector productivo.