AP.- El Senado de Argentina rechazó este jueves el Decreto de Necesidad y Urgencia (DNU) lanzado por el presidente Javier Milei en diciembre, y eventualmente podría quedar completamente anulado en la Cámara de Diputados.
Tras un extenso debate, el polémico DNU, con el que el mandatario busca desregular la economía y reducir la intervención del Estado, obtuvo 42 votos en contra, 25 a favor y 4 abstenciones. Así, el paquete de medidas podría perder vigencia en su totalidad si la cámara baja también lo rechaza.
El argumento central de los senadores que votaron en contra fue el de la “inconstitucionalidad”, teniendo en cuenta que establece múltiples modificaciones de leyes vigentes sin el aval del Poder Legislativo.
Al comenzar el tratamiento del decreto, la senadora por Mendoza de Unión por la Patria (UxP) Anabel Fernández Sagasti, adelantó que desde el bloque peronista se rechazaría “en pleno” porque “a todas luces y manifiestamente es inconstitucional”.
El presidente Milei tenía intenciones de postergar el debate del decreto para abocarse a las negociaciones de cara al Pacto de Mayo y el tratamiento de un nuevo proyecto de ley ‘ómnibus’, más acotado y menos ambicioso que el que naufragó en la Cámara de Diputados en febrero.
El primer miembro del Gobierno en reaccionar al rechazo fue el vocero presidencial, Manuel Adorni, quien afirmó que se trató de un “récord histórico” el hecho de que “por primera vez en la historia” el Senado de la Nación bloqueó un DNU “a apenas tres meses de asumir” la gestión libertaria.
Adorni vinculó el fracaso de la normativa a la “decadencia y el pasado”.
¿Disputas internas?
Sin embargo, este miércoles la vicepresidenta y titular del Senado, Victoria Villarruel, incluyó al DNU en el temario de la sesión convocada por el oficialismo para este 14 de marzo, y generó tensiones internas en el gobierno libertario.
La Oficina del Presidente Milei emitió un comunicado en el que expresó su “preocupación” por “la decisión unilateral” de la vicepresidenta. El texto no menciona a Villarruel, pero, sin decirlo, el mandatario apuntó contra ella porque fue quien firmó la habilitación para debatir el decreto.
Al no contar con mayoría en ninguna de las dos cámaras, Milei y su equipo preveían que el decretazo no tendría los votos suficientes para su aprobación. El partido gobernante La Libertad Avanza (LLA) cuenta con 7 senadores sobre un total de 72. Por eso le reprocharon a Villarruel el hecho de avanzar con “una agenda propia e inconsulta”.
La preocupación y los roces al interior de LLA quedaron oficializadas por el mensaje de la Casa Rosada, pero ya habían sido expresadas por los seguidores del mandatario en las redes sociales, donde llovieron críticas a Villarruel porque el oficialismo no contaba con los votos suficientes.
En medio de la disputa, la vicepresidenta se reunió con senadores y sugirió postergar el debate, tal como pedía el presidente, pero los legisladores no accedieron al pedido y la sesión se mantuvo en pie tal cual había quedado convocada.