En las últimas horas, el Sistema Integrado de Monitoreo de Bosques (SIMB) ha registrado un significativo aumento en los focos de calor en distintas regiones de Bolivia, alcanzando la cifra de 3.224 hasta la tarde del miércoles, según informó el viceministro de Defensa Civil, Juan Carlos Calvimontes, este jueves.
El departamento más afectado por esta situación es Santa Cruz, con un total de 2.441 focos de calor detectados, seguido por Beni con 665, La Paz con 46, Pando con 37, Chuquisaca y Tarija con 17 respectivamente, y Potosí con 1 foco de calor registrado.
Calvimontes explicó que este incremento se relaciona directamente con el inicio de la temporada de chaqueo y la quema controlada de pastizales, prácticas comunes en áreas dedicadas a la ganadería. Es importante destacar que un foco de calor no siempre indica un incendio activo, sino más bien un aumento en la temperatura terrestre, que puede ser resultado de diversas actividades agrícolas o naturales.
“Es crucial recordar que los focos de calor no necesariamente corresponden a incendios forestales, pero sí pueden indicar un riesgo potencial si no son controlados adecuadamente”, enfatizó el viceministro.
Actualmente, el único incendio forestal registrado se localiza en el municipio de San Matías, específicamente en la comunidad Natividad de Santa Cruz, donde brigadas de bomberos están trabajando arduamente para contener las llamas.
El SIMB, a través de su sistema satelital, continúa monitoreando la evolución de estos focos de calor con el fin de tomar medidas preventivas y de respuesta rápida ante posibles incendios que puedan amenazar la biodiversidad y la seguridad de las comunidades locales.
Este fenómeno subraya la importancia de la vigilancia constante y la cooperación entre autoridades y la población para mitigar los impactos negativos de los incendios forestales, especialmente durante la temporada seca y las prácticas agrícolas intensivas en el país.