El primer ministro de Qatar, Mohammed bin Abdulrahman Al Thani, aseguró este domingo que solo asuntos prácticos “menores” separan a Israel de un acuerdo para liberar a los rehenes capturados por el grupo terrorista Hamás durante su ataque a territorio israelí el pasado 7 de octubre. Qatar ha servido como facilitador de las negociaciones para liberar a las cerca de 240 personas capturadas por Hamás.
“Los desafíos que quedan en las negociaciones son muy menores en comparación con los grandes temas, son más bien asuntos logísticos, de carácter práctico”, dijo el funcionario durante una conferencia de prensa conjunta con el jefe de la diplomacia de la Unión Europea, Josep Borrell.
Se desconoce, por el momento, la situación de los rehenes, unos 240, según cifras israelíes. Cuatro -dos mujeres estadounidenses y dos mujeres israelíes- han sido liberadas y otra mujer, una soldado israelí fue rescatada por el Ejército hebreo. El cuerpo de otras dos mujeres fallecidas ha sido encontrado en los alrededores del hospital Al Shifa, el mayor de Gaza, que está asediado por Israel. Hamás anunció hace semanas que varios rehenes había muerto en los ataques israelíes, algo que no ha podido ser confirmado.
Crece la desesperación entre los familiares
Los familiares de los secuestrados han asegurado estar desesperados por la falta de noticias de sus seres queridos y el sábado culminaron una marcha de cinco días desde Tel Aviv hasta Jerusalén, donde reclamaron por la liberación de los rehenes y transparencia a las autoridades.
Cerca de 20.000 personas llegaron a pie a la oficina de Netanyahu, portando carteles con las fotos de los secuestrados y con una consigna clara: “bring them home” (Tráiganlos a casa). “Estamos marchando con ustedes, yo estoy marchando con ustedes, todo el pueblo de Israel está marchando con ustedes”, expresó Netanyahu, que aceptó reunirse con los familiares de los rehenes la semana próxima.
A la espera de conocerse más detalles, la ofensiva israelí continúa dentro de Gaza, donde el Ejército asegura haber tomado el control de importantes infraestructuras. Además, advirtió a los civiles de desplazarse aún más al sur de la Franja, debido a que iba seguir buscando posiciones de Hamás en la región, a la que había pedido anteriormente que se dirigieran.