DW.- El presidente ruso Vladimir Putin, bajo una orden de arresto de la Corte Penal Internacional (CPI) relacionada con su invasión de Ucrania, dijo este viernes que no asistirá a la cumbre del G20 en Brasil del 18 y 19 de noviembre para no perturbarla.
“Entendemos perfectamente que, incluso excluyendo el factor CPI, toda la discusión solo tratará sobre eso. Y eso perturbaría el trabajo del G20. ¿Para qué? Somos adultos”, declaró en un encuentro con periodistas extranjeros.
En marzo de 2023, la CPI emitió una orden de detención en contra de Putin por la presunta deportación ilegal de niños desde que las fuerzas de su país iniciaron su invasión de Ucrania en 2022.
Miembros de la CPI tienen la “obligación” de arrestar a Putin
Los países miembros de la CPI, como es el caso de Brasil, están teóricamente obligados a arrestarlo si ingresa a sus territorios. Sin embargo, a principios de septiembre, Putin fue recibido en Mongolia, también miembro de la CPI, y no fue detenido.
El tribunal con sede en La Haya recordó que sus países miembros tienen la “obligación” de arrestar a las personas con órdenes de arresto. Pero en la práctica, la CPI no dispone de una fuerza coercitiva propia.
El Kremlin, que no reconoce a la CPI, siempre ha rechazado firmemente las acusaciones formuladas por el tribunal contra el presidente ruso.
No obstante, desde que la CPI emitió la orden de detención, Putin ha evitado ciertos viajes al extranjero. Entre otros, se saltó la cumbre del grupo de los Brics en Sudáfrica en agosto de 2023 y luego la cumbre del G20 en India en septiembre del mismo año.