DW.- La presidenta de Taiwán, Tsai Ing-wen, emprenderá la próxima semana un viaje para visitar a sus aliados centroamericanos Guatemala y Belice, indicó este martes el gobierno de este territorio, días después de que Honduras apostara por establecer relaciones diplomáticas con China.
El propósito del viaje es “destacar la amistad con Guatemala y Belice, demostrar los logros de la cooperación bilateral y las perspectivas de beneficio mutuo”, dijo el viceministro de Exteriores, Alexander Yui, en rueda de prensa.
Belice y Guatemala son dos de los 14 países que reconocen oficialmente a Taiwán por encima de China, y el viaje de Tsai se produce después de que Honduras dijera a principios de mes que cambiaría su reconocimiento por el de Beijing.
China considera que Taiwán, autogobernado y democrático, forma parte de su territorio, que algún día recuperará por la fuerza si es necesario, y ha incrementado la presión militar, política y económica para hacer valer esas reivindicaciones. Según su principio de “una sola China”, ningún país puede mantener relaciones diplomáticas oficiales, tanto con China como con Taiwán.
Tsai Ing-wen partirá de Taiwán el 29 de marzo para emprender un viaje de 10 días, con escalas en Nueva York y Los Ángeles, en el trayecto de ida y vuelta a los países centroamericanos, según el Ministerio.
Durante su viaje, la presidenta Tsai se reunirá con su homólogo guatemalteco, Alejandro Giammattei, y con el Primer Ministro de Belice, John Briceno, según informó el Ministerio de Asuntos Exteriores.
A la pregunta de si Tsai se reuniría con el presidente de la Cámara de Representantes de EEUU, Kevin McCarthy, en Los Ángeles, el viceministro de Asuntos Exteriores, Alexander Yui, se limitó a decir que su “itinerario de tránsito se está organizando adecuadamente con la parte estadounidense”.
McCarthy dijo a principios de mes que vería a Tsai en California, su estado natal, y el Departamento de Estado de EEUU restó importancia al encuentro ante las protestas de China.
El martes, el portavoz del Ministerio de Asuntos Exteriores chino, Wang Wenbin, reiteró la oposición de su país a que Tsai se reuniera con funcionarios estadounidenses. “Nos oponemos firmemente a cualquier forma de intercambio oficial entre Estados Unidos y Taiwán”, declaró en una rueda de prensa en Beijing. “China ha hecho solemnes gestiones ante EEUU en este sentido”.
Washington es uno de los principales aliados mundiales de Taiwán y su mayor proveedor de armas, a pesar de que en 1979 cambió su reconocimiento diplomático por el de Beijing. En agosto del año pasado, una visita de la predecesora de McCarthy, Nancy Pelosi, a Taiwán provocó la condena de China, que llevó a cabo simulacros militares masivos alrededor de la isla en respuesta.
El viaje de Tsai se produce en un momento crítico para Taiwán, después de que la presidenta de Honduras, Xiomara Castro, dijera la semana pasada que su país establecería “relaciones oficiales” con China.
América Latina ha sido un campo de batalla diplomático clave para China y Taiwán desde que ambos países se separaron en 1949 tras una guerra civil.
La decisión de Honduras, que supondría la ruptura de los antiguos lazos oficiales con Taiwán, se produce tras las negociaciones con China sobre la construcción de una presa hidroeléctrica en el país. Se trata de la continuación de una tendencia reciente en la región, en la que Nicaragua, El Salvador, Panamá, República Dominicana y Costa Rica han cambiado su reconocimiento diplomático a Beijing en los últimos años.