Tras ocho días de bloqueo en la carretera que conecta La Paz con los destinos turísticos del lago Titicaca y el santuario de Copacabana, la dirigencia de los Ponchos Rojos de la Federación Sindical Única de Trabajadores Campesinos Túpac Katari decidió suspender temporalmente la medida de presión. La decisión fue comunicada mediante un instructivo firmado por su máximo dirigente, David Mamani, y otras autoridades originarias, en el que se instruye a las bases replegarse de los puntos de bloqueo y movilizarse este miércoles en la ciudad de La Paz.
El documento señala que la medida se levanta en “cuarto intermedio” para reorganizarse y fortalecer sus reivindicaciones. El principal motivo de la movilización hacia la sede de gobierno es exigir al Ejecutivo el cumplimiento de demandas sociales como pueblos indígenas. La concentración está prevista para las 08:00 en la Cruz Papal, en la ciudad de El Alto, desde donde los Ponchos Rojos marcharán hacia La Paz.
Implicaciones y contexto
Los bloqueos en la ruta a Copacabana generaron complicaciones en el tránsito hacia los atractivos turísticos del lago Titicaca, afectando tanto a la población local como a los visitantes. En un inicio, la movilización de los Ponchos Rojos se enfocó en la recuperación de su sede sindical en la zona de San Pedro, controlada por una facción afín al presidente Luis Arce. Sin embargo, las demandas se ampliaron, exigiendo la renuncia del mandatario debido a la falta de dólares y la escasa distribución de carburantes en el país.
Ante el anuncio de la marcha, el ministro de Gobierno, Eduardo Del Castillo, declaró que se garantizará el orden en la ciudad y advirtió sobre posibles consecuencias legales si la movilización deriva en actos de violencia. “Nosotros como Gobierno debemos evitar enfrentamientos y violencia. Si alguna de las conductas efectuadas mañana se constituye en algún tipo penal, actuaremos con toda la fuerza de la ley”, afirmó el ministro.