Un total de 16 puntos de bloqueo continúan en Bolivia, según el último informe de la Administradora Boliviana de Carreteras (ABC). La mayoría de estas obstrucciones afecta las principales rutas que conectan Cochabamba y Santa Cruz, tanto por la carretera antigua como por la nueva.
El viernes, un operativo conjunto de la Policía y el Ejército despejó la vía hacia el occidente del país, con enfrentamientos particularmente en la localidad de Parotani, donde las autoridades han dejado un contingente para mantener el orden. Sin embargo, la situación en Cochabamba sigue complicada con 14 bloqueos activos, mientras que Santa Cruz presenta otros dos puntos críticos.
El viernes en la noche, el ministro de Gobierno, Eduardo Del Castillo, informó la detención de 55 personas en el marco del operativo de desbloqueo. Pese a esta acción, los manifestantes han decidido continuar con las protestas. Humberto Claros, dirigente de la Confederación Sindical Única de Trabajadores Campesinos (Csutcb) alineado con el sector evista, reiteró el rechazo a cualquier propuesta de cuarto intermedio, señalando que “el pueblo no quiere cuarto intermedio, el Gobierno nos ha humillado”.
Las protestas ya cumplen 20 días consecutivos, encabezadas por simpatizantes de Evo Morales, líder del Movimiento Al Socialismo (MAS). Entre sus demandas, exigen el fin de los procesos judiciales contra Morales y atención a sus reclamos. En apoyo a las movilizaciones, el expresidente Morales inició una huelga de hambre el viernes.
Las consecuencias de estas medidas de presión afectan considerablemente la circulación y generan una creciente tensión en el país, poniendo a prueba los esfuerzos del Gobierno para restablecer la normalidad en las principales rutas del país.