AP.- Un perro pastor de Georgia se está recuperando en su casa dos días después de matar a una manada de coyotes que atacó el rebaño de ovejas de su dueño, dijo el granjero John Wierwiller.
Casper, un perro de raza gran pirineo de 20 meses de edad de Decatur, luchó contra una manada de coyotes que amenazaban la granja de ovejas de Wierwiller, de acuerdo con el granjero. La pelea duró más de media hora, dejó a ocho coyotes muertos y a Casper ensangrentado, con la piel y parte de la cola arrancadas, comentó Wierwiller a la televisora WAGA de Atlanta.
Escapó, pero regresó herido dos días más tarde después de que Wierwiller hiciera una llamada en las redes sociales.
“Me miraba como diciendo: ‘Jefe, deja de mirar lo mal que estoy, cuida de mí’”, dijo Wierwiller.
LifeLine Animal Project ha recaudado más de 15.000 dólares para poder pagar los recibos del hospital del perro pastor.
Aunque los perros rara vez se imponen como Casper, las manadas de coyotes que atacan a los animales domésticos se han convertido en algo habitual en las zonas rurales y suburbanas en crecimiento que colindan con las zonas silvestres de todo Estados Unidos.