El ministro de Educación, Edgar Pary, denunció este domingo que la dirigencia de la Confederación de Trabajadores de Educación Urbana de Bolivia (Cteub) “aplica coerción y dictadura sindical para obligar a los profesores de base a acatar sus medidas de presión”.
“Los colegas, lamentablemente, no tienen interés en la educación, continúan las marchas las medidas y lo más grave hay un trabajo de coerción, de dictadura sindical que están sometiendo a muchas unidades educativas”, denunció Pary en Bolivia TV.
Entre los casos puntuales, la autoridad mencionó que en Sucre se aplicaron tarifarios de multas, tanto para los maestros que no acaten las marchas y los paros como también para los padres que no apoyen esas medidas.
También expuso un memorándum de llamada de atención que un director de una unidad educativa de La Paz extendió a un profesor el pasado jueves porque estaba dictando clases en la primera jornada del paro de 48 horas.
“Se está aplicando el veto sindical, los procesos sindicales”, lamentó el ministro.
Basado en las pruebas documentadas, el ministro señaló que, en las tres jornadas de paro, el 24, 30 y 31 de marzo, se aplicó una “coerción” y “amenazas permanentes” en contra de los maestros que sí querían trabajar.
Por ello sostuvo que el “paro fue forzado” y que en el trascurrir de los días se fue contaminando con actores políticos de algunas plataformas y del denominado Comité Nacional de Defensa de la Democracia (Conade).
Pero además de estas acciones de “coerción”, el ministro denunció que se está empleando mentiras sobre los nuevos contenidos curriculares para movilizar a los padres de familia.
Luego de enfatizar que solo cerca del 20% de los contenidos curriculares fueron actualizados, Pary ratificó que su aplicación será progresiva, pero que no será suspendida como exige la dirigencia de la Cteub.