DW.- El jefe humanitario de la ONU advirtió que el balance de muertes por el terremoto en Siria y Turquía se puede “duplicar o más” desde los más de 28.000 fallecidos contabilizados hasta ahora, según declaró el sábado a la cadena Sky News.
“Es realmente difícil estimar de forma muy precisa, porque tienes que llegar debajo de los escombros, pero estoy seguro que se va a duplicar o más”, dijo Martin Griffiths el sábado en la ciudad turca de Kahramanmaras, cerca del epicentro del sismo.
“Hemos lidiado con muchos conflictos en todo el mundo (…) Pero perder 20, 30 o 40 mil personas en una noche, no vemos esto ni siquiera en estos conflictos”, continuó Griffiths. “Es aterrador”, añadió.
“Lo que vi hoy en Turquía fue devastador”, dijo Griffiths a través de su cuenta de Twitter. “Lo que alguna vez fueron hogares, llenos de familias y recuerdos, ahora yacían retorcidos y enredados. Nuestros pensamientos están con los afectados y seguiremos apoyando en todo lo que podamos”, añadió.
Seis días después del terremoto de magnitud 7,8 ocurrido el lunes de madrugada, el cómputo provisional entre los dos países se sitúa en 28.191 personas: 24.617 en Turquía y 3.574 en Siria.
En tanto, los socorristas continuaban encontrando supervivientes entre los escombros, cinco días después del terremoto, en medio de un frío gélido que dificulta los rescates y agudiza el sufrimiento de la población.
Según la ONU, al menos 870.000 personas precisan urgentemente comida y, solo en Siria, 5,3 millones de personas se quedaron sin casa.
La Organización Mundial de la Salud estimó que 26 millones de personas se vieron afectadas por el terremoto y lanzó un pedido urgente para recaudar 42,8 millones de dólares para financiar las necesidades sanitarias inmediatas.