El curioso hecho sucedió en la comunidad Mbuyapey, departamento de Paraguarí de Paraguay, cerca al arroyo Yacaré, situado al noroeste de Arroyo Santa Rita, y al sureste de Cerro Santo Tomás.
Elva Irrazábal de 71 años de edad relató al portal Crónica que “fueron 5 años de puro sufrimiento y de no saber qué me pasaba. No dormía, ya no quería comer”.
La kuñakarai cuenta que una noche se sintió mal, de repente le vino un dolor de barriga intenso comenzó y con él, su calvario.
Pasaron días, meses, años… y su situación empeoraba cada vez más. “Pensé en lo peor, iba de aquí para allá para consultar, pero nadie me podía decir cuál era mi problema”, señaló.
“Pero yo estaba cada vez peor. El dolor era insoportable. Ya no quería ni comer porque sentía que algo se movía y se movía en mi panza. Me desesperaba, me molestaba mucho. Me sentía muy mal”, señaló. Incluso, doña Elva hasta llegó a pensar que estaba embarazada mba’e, pero nada qué ver.
En medio de angustia y desesperación, doña Elva visitó a cuanto médico ñana le presentaban. Hasta que encontró a una mujer que le realizó un trabajo de “liberación” y señala lo que pasó con mucha emoción y sentimiento “¡eché tres víboras de entre mis piernas”, relató.
“Mucha gente a lo mejor no me va a creer, pero mi marido y mis hijos son testigos. La primera víbora parecía un monstruo, era del tamaño de un bebé, ese cayó en el wáter. Los demás cayeron en la pieza. Yo no quería creer, pero fue así”, sostuvo. “Mis hijas colocaron a las víboras en un frasco y luego de unos días lo enterraron”. Según Elva, fue víctima de un trabajo del mal. “Me hicieron payé (brujería) y ‘parí’ tres víboras.
Según la víctima, este fue un trabajo de macumba que posiblemente le hicieron con un ritual con oraciones en el arroyo Jakare’y que está cerca de su casa.
“No sé quién me pudo hacer payé, pero ahora tampoco me importa porque ya estoy curada. Sufrí muchísimo y por fin me liberé de este mal”, añadió.