Este viernes, el exmandatario y líder del Movimiento Al Socialismo (MAS), Evo Morales, evitó responder de manera directa sobre si tuvo una hija con una menor de edad en 2016. En una conferencia de prensa convocada por él mismo, Morales se mostró visiblemente molesto cuando se le preguntó por este tema. Su reacción fue inmediata: hizo referencia al presidente Luis Arce y su postura sobre la privacidad familiar, afirmando que “la familia es sagrada” y que no se debería tocar ese tema.
La pregunta surgió en medio de una serie de denuncias y procesos judiciales que Morales ha enfrentado recientemente, incluidas acusaciones por trata de personas. Durante la conferencia, un periodista le preguntó si era cierto que en 2016 tuvo una hija con una menor de edad, a lo que Morales respondió: “Yo te preguntaría a ti, cuántos hijos tienes; Lucho (Luis Arce), dijo que no hay que meterse con la familia, la familia es sagrada”. La tensión aumentó cuando, al finalizar el evento, desafió al periodista a contar cuántos hijos tenía “y en cuántas mujeres”.
Morales ha permanecido en el Chapare, Cochabamba, tras las denuncias que lo vinculan en una nueva relación con una menor de edad. En su intervención, dejó claro que está acostumbrado a enfrentar procesos judiciales, y recordó que todos los presidentes desde Víctor Paz Estenssoro lo procesaron, excepto Eduardo Rodríguez Veltzé. Aseguró, de manera desafiante, que ha ganado cada juicio en su contra y que este no sería la excepción.
El exmandatario sostuvo que las denuncias actuales no son ataques personales, sino intentos de desestabilizar al “movimiento indígena”. Morales denunció que se está llevando a cabo una “criminalización” del proceso político, pasando de una “instrumentalización jurídica” a una “judicialización política”.