El presidente Luis Arce anunció que la nueva planta procesadora de hoja de coca, ubicada en Sacaba, Cochabamba, contará con tres líneas de producción destinadas a diversificar el uso de este recurso. El proyecto, que registra un avance físico del 68%, representa una inversión de más de 62 millones de bolivianos y está previsto para concluir en julio de este año.
La primera línea de producción estará enfocada en la elaboración de productos secos, como infusiones, harina y cápsulas. La segunda línea se destinará a fitofármacos, con la producción de dentífrico de hoja de coca, ungüentos, cremas y jarabes. Finalmente, la tercera línea se especializará en la fabricación de caramelos.
“Para nuestro Gobierno, la hoja de coca es sumamente importante. No solo reivindica todas sus propiedades, sino que es un elemento de identidad y cohesión social”, afirmó el mandatario durante el acto de conmemoración del Día Nacional del Acullico, celebrado en la plaza Murillo de La Paz.
La hoja de coca como símbolo cultural y económico
Arce destacó que el consumo de la hoja de coca, tradicionalmente asociado al occidente del país, se ha expandido a los nueve departamentos, consolidándose como un símbolo cultural y de soberanía. “Es un legado ancestral que representa nuestra identidad, cultura y tradición”, aseguró.
Asimismo, el presidente anunció la próxima construcción del Centro de Industrialización e Investigación de la Hoja de Coca en Coroico, un proyecto que demandará una inversión de 108 millones de bolivianos. Este centro buscará fortalecer la investigación y el desarrollo de nuevos usos para este recurso.
Con estas iniciativas, el Gobierno busca promover la industrialización de la hoja de coca, valorando su potencial en el mercado interno y consolidándola como un recurso cultural y económico clave para el país.