DW.- La madre del líder opositor ruso Alexei Navalny pidió este martes al presidente ruso, Vladimir Putin, que entregue el cuerpo de su hijo “sin demora”.
“Me dirijo a usted, Vladimir Putin. La solución de este asunto sólo depende de usted. ¡Déjeme ver de una vez por todas a mi hijo!”, dijo Liudmila Navalnaya, madre del opositor, en un video colgado por el equipo de Navalny en YouTube.
La progenitora de Navalny añadió: “Exijo que me entreguen inmediatamente el cuerpo de Alexei para poder enterrarlo como Dios manda”.
“Es el quinto día que no puedo verlo, no me entregan su cuerpo e incluso no me dicen donde se encuentra”, señaló.
Destacó que el video está grabado frente a la prisión “Lobo Polar”, de la localidad ártica de Jarp, donde el pasado viernes murió repentinamente el opositor.
El equipo de Navalny publicó en Telegram la carta dirigida a la Administración Presidencial y firmada de puño y letra por Liudmila Navalnaya.
En dicho texto denuncia que el Comité de Instrucción del distrito autónomo de Yamalo-Nenets no le permite acceder al cadáver de su hijo.
La madre, de 69 años, llegó el sábado a esa inhóspita zona de Rusia, pero tanto los funcionarios de prisiones como los empleados de la morgue se negaron a atender sus solicitudes.
Ella no ha llegado a acusar a Putin de ordenar el asesinato de su hijo, algo que su hizo la viuda del opositor, Alexei Navalny, que recogió el lunes el testigo de la lucha contra el Kremlin, cuyo portavoz, Dmitri Peskov, condenó hoy dichas afirmaciones.
“Me importa un bledo cómo el secretario de prensa del asesino comente mis palabras. Devuélvanme el cuerpo de Alexei y dejen que sea enterrado dignamente, no impidan que la gente se despida de él”, dijo. Y añadió: “Y le pido de verdad a todos los periodistas que todavía puedan hacer preguntas: no pregunten por mí, pregunten por Alexei”.
Los correligionarios de Navalny acusan a las autoridades rusas de negarse a entregar el cuerpo para “borrar las huellas” del crimen.
Según informó OVD-Info, organización que vela por los derechos de los detenidos, casi 70.000 personas ya han firmado una petición popular para que las autoridades le entreguen el cadáver a la familia.