El vicepresidente del MAS, Gerardo García, calificó como “unilateral” la decisión de la Confederación Sindical de Comunidades Interculturales Originarias de Bolivia (Csciob) de expulsarlo de esa organización y suspenderlo de su cargo en el MAS; además, aseguró que esa medida no tiene efecto legal en el instrumento político.
“Este tipo de expulsión es unilateral y hay que hacer notar que nosotros estamos en lo político y lo de ellos es orgánico sindical. Tendría que haber un congreso nacional que tenga que pronunciarse. Esto se viabiliza ante el Tribunal Supremo Electoral”, declaró a El Deber el dirigente.
El dirigente masista insistió en que la determinación de los interculturales no le afecta en nada y que no tiene ningún efecto legal, “las expulsiones se hacen en un congreso orgánico donde participan todos los sectores. Seguramente en el congreso que vamos a tener se tomará una decisión, me ratificarán o me cambiarán y eso definirá el congreso político. No tiene ningún efecto”.
A través de una resolución, los interculturales decidieron expulsarlo de sus filas porque ya no representa a ese sector dentro del MAS, señaló lo tildaron de “traidor” porque no respalda la gestión del presidente Luis Arce. Además, conminaron a ese partido a convocar a un congreso nacional para elegir a la dirección nacional.
García comparó su caso con el del diputado Rolando Cuéllar, cuya expulsión no cobró legalidad hasta el momento debido a que la determinación no fue ratificada en un congreso del MAS.
“El congreso sí o sí se va a llevar a cabo a cabo este año. El Tribunal Supremo Electoral está consciente de que anteriormente hemos sido los primeros en adecuarnos a la Ley de Organizaciones Políticas. Con el nuevo estatuto nosotros corremos legamente con la gestión hasta este 2023. Cumplimos dos años de acuerdo con nuestro estatuto. Esto es de conocimiento del Tribunal Supremo Electoral”, remarcó.
Agregó que, en el caso de la decisión de los Interculturales, esta fue asumida por “cinco o diez líderes”.
“Con todas las bases estamos bien, pero con quienes no estamos bien es con las cabezas, con los ejecutivos, con los de la Única, porque ellos se sintieron afectados con nuestras declaraciones, con nuestras denuncias que hemos ido presentando”, afirmó.