En un operativo conjunto entre la Agencia Nacional de Hidrocarburos (ANH) y la Policía Boliviana en Potosí, se logró la interceptación de siete vehículos de alto tonelaje que realizaban carguíos repetitivos de diésel oíl. Según las autoridades, entre enero y la fecha, estos vehículos habrían cargado de manera ilegal más de 100 mil litros de este carburante, el cual está subvencionado por el Estado.
El operativo culminó con la aprehensión de siete personas, quienes ahora enfrentan acusaciones por los delitos de almacenaje, comercialización y compra ilegal de carburantes, según lo estipulado en el artículo 226 bis del Código Penal. De ser hallados culpables, podrían enfrentar penas de privación de libertad de tres a seis años.
Desde la ANH, se informó que estos operativos de control e interdicción son parte de una estrategia constante para frenar el contrabando de combustibles líquidos, que constituye un delito grave contra los intereses del Estado y la población boliviana. La institución reiteró su compromiso con la protección de los recursos energéticos del país, los cuales son destinados al beneficio de toda la ciudadanía.
Este golpe al contrabando se suma a los esfuerzos continuos por parte del Gobierno para preservar la integridad del mercado interno de combustibles, evitando que el diésel oíl, subvencionado para el uso legítimo de los bolivianos, termine en manos de redes ilegales.