La mañana de este lunes, un grupo de campesinos autodenominados “ponchos rojos” intentó tomar por la fuerza la sede de la Federación Tupac Katari en La Paz, resultando en el saldo de siete policías heridos. El incidente ocurrió en las cercanías de la sede de la organización, ubicada en la zona de San Pedro.
La protesta, liderada por David Mamani, se tornó violenta cuando los manifestantes lograron superar un cordón de seguridad establecido por la policía. En respuesta, las autoridades utilizaron agentes químicos para dispersar a los manifestantes.
El ministro de Gobierno, Eduardo del Castillo, condenó los hechos y proporcionó un balance preliminar de los daños. “Hasta el momento, se informa a la población boliviana que siete efectivos policiales y dos civiles han resultado heridos debido a los enfrentamientos en la sede de Gobierno”, dijo Del Castillo.
Además, el ministro expresó su preocupación por la escalada de violencia, subrayando que el “camino de la violencia y el enfrentamiento nunca será el camino”. También indicó que se está investigando el origen de los actos violentos y criticó el uso de intereses personales y mezquinos que, según él, han llevado a estos conflictos.
David Mamani, quien dirige la movilización, había sido previamente desconocido por sus propias bases en julio, lo que ha generado dudas sobre su legitimidad y apoyo dentro del grupo campesino. La situación actual refleja una creciente tensión y división dentro del movimiento campesino, que ahora se enfrenta a la presión de las autoridades y de la opinión pública.