La Aduana Nacional confiscó tres contenedores con grifería falsificada de la marca FV S.A., valuados en más de 500 mil dólares (3,5 millones de bolivianos). Se trata de uno de los operativos más grandes contra el contrabando en este sector.
La incautación se llevó a cabo en dos fases: el 19 de febrero se interceptaron dos contenedores y el 20 de febrero, un tercer cargamento. Todos los productos serán destruidos por las autoridades.
La venta de grifería falsificada no solo afecta a la economía formal, sino que representa un riesgo para la salud pública. Estos productos, fabricados con materiales de baja calidad, pueden contaminar el agua con sustancias nocivas como plomo y sarro, superando los niveles permitidos por normas internacionales.
Además, al no contar con certificaciones ni garantías, los consumidores quedan desprotegidos ante fallas o deterioro prematuro.