La Fiscalía Especializada en Delitos en Razón de Género y Juvenil, bajo la dirección de Alejandra Rocha, ha emitido una imputación formal contra Zdzislaw A. K., fraile franciscano de nacionalidad polaca, de 76 años, conocido como padre Eusebio. El religioso es acusado de haber cometido abuso sexual en 1997 contra una adolescente de 17 años en un municipio del departamento de La Paz.
El caso, que permaneció en silencio durante más de dos décadas, fue reabierto cuando una de las víctimas decidió presentar una denuncia formal en mayo de 2023. La decisión de la víctima de romper el silencio se produjo tras el anuncio del Ministerio Público de iniciar una investigación de oficio relacionada con otro caso de pederastia, el del sacerdote jesuita Alfonso Pedrajas.
Según los antecedentes, en 1997 la adolescente, junto a una compañera de estudios, conoció al fraile Zdzislaw A. K. durante un viaje escolar. El religioso, aprovechando la confianza que había generado, las llevó a un huerto bajo pretextos, donde presuntamente cometió los actos de abuso. Las jóvenes no revelaron el incidente en ese momento, manteniéndolo en secreto hasta la reciente denuncia.
Alejandra Rocha explicó que, aunque el delito fue tipificado originalmente como “Abuso Deshonesto”, la legislación actual lo clasifica como “Abuso Sexual”. “Estamos a la espera de notificar formalmente al imputado y proceder con la audiencia de medidas cautelares”, señaló Rocha.
Este caso se suma a otros ocho de pederastia que están siendo investigados a nivel nacional. Hasta la fecha, la Fiscalía ha emitido cuatro imputaciones formales y continúa con los actos investigativos en busca de otros presuntos autores y encubridores.
La reactivación de casos antiguos de abuso sexual en Bolivia refleja un creciente esfuerzo por parte de las autoridades y la sociedad para hacer frente a los delitos cometidos por miembros del clero. El caso de Zdzislaw A. K. se convierte en un símbolo del compromiso de justicia para las víctimas, independientemente del tiempo transcurrido.