El sector gremial de El Alto ha convocado movilizaciones para el próximo 13 de enero en rechazo a la disposición adicional séptima del Presupuesto General del Estado (PGE) 2025. Además, exigen soluciones a la escasez de combustible y al aumento en los precios de la canasta familiar.
Toño Siñani, dirigente de la Central de Trabajadores de Bolivia (CTB), informó que la medida de protesta fue definida en un ampliado y consistirá en una marcha desde la Ceja de El Alto hasta el centro de La Paz. “Estamos preocupados, estamos en estado de emergencia. Todo ha subido, pero no porque los gremiales o productores queramos aumentar los precios, sino por el problema del dólar, que el Gobierno insiste en mantener a Bs 6,96, aunque en la realidad supera los Bs 12”, declaró Siñani a Unitel.
Rechazo a la disposición adicional séptima
Los gremialistas manifestaron su descontento con la disposición adicional séptima del PGE, que permite a las entidades estatales realizar controles, fiscalizaciones, confiscaciones y decomisos de productos en casos de retención o encarecimiento de alimentos. Según los comerciantes, esta normativa pone en riesgo su actividad económica y genera incertidumbre en el sector.
En Santa Cruz, Edgar Álvarez, dirigente de la Confederación Nacional de Gremiales, expresó preocupación por el impacto de esta disposición en toda la cadena productiva. “Esta medida no solo afecta a los gremialistas, sino también a productores y distribuidores. Nos enfrentamos a un escenario de incertidumbre”, afirmó.
El sector gremial cruceño ha convocado a un ampliado para el 8 de enero, donde se definirán posibles acciones en respuesta a la normativa.
Demandas y advertencias
Los gremialistas también demandan al Gobierno respuestas concretas a la crisis de abastecimiento de combustibles y al alza de precios de productos básicos. Enfatizan que estas problemáticas afectan directamente a los costos operativos y a la economía familiar.
Ante la falta de atención a sus demandas, advirtieron que las protestas podrían radicalizarse y extenderse a nivel nacional. “No descartamos medidas más drásticas si nuestras observaciones al PGE no son escuchadas. Esto no es solo una lucha de los gremialistas, es una lucha por la estabilidad económica del país”, subrayó Siñani.
El conflicto amenaza con intensificarse en los próximos días si no se logra un acuerdo entre los sectores movilizados y el Gobierno.