El ministro de Planificación, Sergio Cusicanqui, informó que la Autoridad del Sistema Financiero (ASFI) ha recibido instrucciones para evaluar y proponer “controles o las medidas” necesarias que permitan retornar a la normalidad en la provisión del dólar.
“El presidente Luis Arce ha sido claro en su mandato de trabajar y plantear respuestas concretas ante la nueva situación surgida tras el intento fallido de golpe de Estado del 26 de junio. La ASFI tiene la responsabilidad de presentar soluciones concretas que permitan restablecer el equilibrio en la provisión de la divisa extranjera”, dijo el ministro.
Reportes de diversos medios de comunicación han señalado una escasez del dólar, con una cotización paralela que ha superado los Bs 10, en contraste con el cambio oficial establecido por el Banco Central de Bolivia (BCB) en Bs 6,96 para la venta y Bs 6,86 para la compra. Cusicanqui destacó que la especulación en torno a la cotización del dólar se ha exacerbado recientemente, a pesar de los logros en la balanza comercial que incluyen un superávit de $us 68 millones en mayo.
Este superávit, resultado de políticas de fomento a la producción y exportación acordadas en febrero con los empresarios, implica una mayor circulación de dólares en el país. Entre las medidas implementadas para enfrentar la escasez transitoria de dólares se encuentran la liberación de exportaciones con agilización de trámites, la devolución inmediata de los Certificados de Devolución de Impuestos (CEDEIMs) y la emisión de bonos en dólares por parte del BCB.
“Con la Confederación de Empresarios Privados de Bolivia se han establecido ciertos acuerdos y consensos sobre los cuales hemos venido trabajando”, explicó Cusicanqui en la televisora estatal. Sin embargo, subrayó la necesidad de revisar la situación actual y determinar qué otras medidas puede adoptar el Gobierno nacional.
Reiteró que a pesar del contexto internacional de crisis y el bloqueo en la Asamblea Legislativa Plurinacional para inyectar $us 900 millones en créditos externos, Bolivia muestra indicadores positivos de crecimiento y control de la inflación. Sin embargo, el aumento de precios en productos importados debido al encarecimiento de los fletes y otros factores externos está generando una “inflación importada”.