El ministro de Economía y Finanzas Públicas, Marcelo Montenegro, aseguró que el aumento salarial de este año estimulará la demanda interna y rechazó que se trate de una “medida política”.
“Hay que considerar que esto es un círculo virtuoso, porque este incremento va a posibilitar que haya un efecto de demanda para los bienes que se producen dentro de la economía y es un estímulo a la demanda interna”, afirmó Montenegro, en contacto con Red Uno.
El martes, el presidente Luis Arce y la dirigencia de la Central Obrera Boliviana (COB) acordaron un incremento del 3% al salarial básico nacional y del 5,85% al mínimo nacional, bajo la premisa de preservar la generación de empleo, el crecimiento y la estabilidad económica.
La autoridad gubernamental explicó que la demanda interna es uno de los motores más importantes de la economía boliviana, en relación al sector externo que “se está volviendo a dinamizar, pero no de la manera que uno espera”.
El incremento salarial para el presente año, fue debatido por la COB y el Gobierno en mesas de trabajo con argumentos y contrargumentos con base en aspectos técnicos como la tasa de inflación y la dinámica del mercado laboral.
“Se van barajando muchos aspectos técnicos, no puede considerarse que es una medida estrictamente política porque está basada primero en la reposición del poder adquisitivo, en el salario mínimo hay esa reposición y, adicionalmente, hay un incremento en el poder de compra y también en el haber básico”, afirmó.
En febrero del presente año, mediante un Pliego Petitorio, la dirigencia de la Central Obrera propuso al Órgano Ejecutivo un incremento del 8% al salario mínimo nacional y de un 7% al haber básico.
No obstante, el presidente Arce afirmó que, con el incremento acordado, “cuidamos las finanzas públicas, preservamos la generación de empleo, el crecimiento económico y la estabilidad económica”.