Perú21.- Anoche, el ministro de Defensa, Alberto Otárola, anunció que el Gobierno declara en emergencia la red vial nacional y desplegará a las Fuerzas Armadas (FF.AA.) para recuperar el orden al interior del país, en medio de una ola de violentas protestas que sigue en aumento.
“Vamos a asumir el control de la red vial nacional en todo el país para asegurar el libre tránsito de todos los peruanos”, aseveró Otárola ante la prensa tras una reunión en Palacio de Gobierno con la presidenta Dina Boluarte; el ministro del Interior, César Cervantes, el jefe del Comando Conjunto de las FF.AA. y el comandante general de la Policía Nacional del Perú (PNP).
Además, se dispuso la inmediata protección a cargo de las fuerzas militares de activos nacionales e infraestructura con valor estratégico, tal como centrales hidroeléctricas y aeropuertos. Estas medidas serán coordinadas hoy en una reunión del Consejo de Seguridad y Defensa Nacional.
Asimismo, el Gobierno declaró anoche en estado de emergencia las regiones de Ica y Arequipa, que se suman a Apurímac.
Otárola destacó que tienen “plenamente identificadas a las personas que están trabajando contra el estado de derecho en el país” y cifró en unas 8,000 personas las que participan en los disturbios.
Según el último reporte de la PNP, hasta ayer a las 5:00 p.m., se registra bloqueos en 69 puntos de la red vial nacional en 14 regiones, siendo las más perjudicadas Apurímac y Arequipa.
Los desmanes y actos subversivos no cesan y atentan deliberadamente contra instituciones claves del Estado. Sujetos no identificados incendiaron sedes del Ministerio Público y el Poder Judicial en Abancay (Apurímac), en Huancavelica, y en Camaná y Majes, en Arequipa, quemando importante información, documentos, muebles y otros enseres. En Madre de Dios, manifestantes incendiaron la sede de la Sunat.
La prensa también fue atacada por segundo día consecutivo. El local de la Compañía de Televisión Cusqueña (CTC), importante casa televisiva en Cusco, fue incendiado en medio de manifestaciones y saqueos y destrozos alrededor de la Ciudad Imperial. Imágenes difundidas en redes sociales registraron actos de vandalismo en centros comerciales y tiendas del Centro Histórico. También se atentó nuevamente contra el Aeropuerto Internacional Alejandro Velasco Astete, que permanece con vuelos suspendidos.
Los actos delictivos contra comercios se replicaron en Arequipa, en donde, según fuentes de primera mano, en horas de la tarde de ayer hubo saqueos en casi todos los distritos de la Ciudad Blanca. Centros comerciales y agencias bancarias fueron los principales objetivos.
En ciudades como Puno, Huamanga (Ayacucho), Piura y Cajamarca hubo movilizaciones aunque no se reportaron actos de violencia.
Las movilizaciones pacíficas alrededor del país se han visto opacadas por el protagonismo de los actos subversivos por parte de sujetos que vienen siendo vinculados a grupos políticos radicales, algunos de ellos vinculados al Movadef, y sectores económicos informales como la minería ilegal.
A pesar de ello, en Abancay, frente a los desmanes, varios manifestantes, en su mayoría jóvenes, marcharon en contra de los actos violentos realizados por vándalos contra varias instituciones públicas de la capital apurimense.
a escalada de protestas y disturbios impulsó a la presidenta Dina Boluarte a instalar ayer un gabinete de gestión crisis y señalar ante la prensa que se viene evaluando declarar el estado de emergencia a nivel nacional.
Tras una reunión en el Centro de Operaciones de Emergencia Nacional (COEN), Boluarte dio a conocer, no obstante, que ha ordenado al Ministerio del Interior que no se use ninguna arma letal ni perdigones de goma.
De esta manera rectificó al general PNP Víctor Zanabria Angulo, jefe de la Región Policial Lima, quien en la mañana había advertido que se elevaría “el nivel respuesta”, luego de registrarse más de un centenar de policías heridos, 15 de ellos en un ataque con explosivo.