La Fiscalía ha imputado a 21 personas por su presunta participación en el reciente desbloqueo en Parotani, Cochabamba, y las acusa de delitos como terrorismo y alzamiento armado. Los enfrentamientos se produjeron en la carretera hacia el occidente de Bolivia, donde los manifestantes utilizaron explosivos, piedras y otros objetos contundentes en choques violentos con la Policía.
Wilfredo Chávez, abogado del Movimiento Al Socialismo (MAS), denunció irregularidades en el proceso de imputación y afirmó que se vulneraron derechos constitucionales. “Existen dos imputaciones: una contra 20 personas y otra contra un solo individuo. Los delitos señalados son terrorismo, alzamiento armado y graves delitos contra la seguridad del Estado, según la acusación del Ministerio de Gobierno”, declaró Chávez.
Además de los 21 imputados, otras 34 personas permanecen detenidas y están a la espera de una decisión de la Fiscalía sobre su situación legal. En total, 55 aprehendidos se encuentran en celdas de la Fuerza Especial de Lucha Contra el Crimen (Felcc) en La Paz, bajo condiciones que, según los abogados defensores, son inadecuadas y vulneran derechos fundamentales.
Chávez también denunció que a los detenidos se les asignaron abogados de oficio, a pesar de haber solicitado representación de confianza. “Ellos pidieron un abogado de confianza, pero les fue impuesto uno que depende del Ministerio de Justicia”, explicó el abogado, quien añadió que la defensa ha apelado esta decisión para garantizar una representación justa.
El conflicto en Parotani se intensificó el pasado viernes, cuando se produjo un fuerte enfrentamiento entre los manifestantes y la Policía. Las autoridades sostienen que los detenidos participaron en acciones que pusieron en riesgo la seguridad del Estado, lo que justificó la imputación de cargos por terrorismo.