El juez Nelson Alberto Rocabado, del Tribunal de Instrucción Penal de Tarija, reprogramó la audiencia contra Evo Morales para el viernes 17 de enero porque sus abogados presentaron un certificado médico que alegaba problemas de salud del exmandatario.
El documento, emitido el 12 de enero, señala que Morales padece de bronconeumonía y debe guardar reposo absoluto durante cinco días. Tras un extenso debate, el juez validó el certificado y accedió a suspender la audiencia.
Por su parte, la fiscal departamental de Tarija, Sandra Gutiérrez, anunció que se enviará a un médico del Instituto de Investigaciones Forenses (IDIF) para realizar una valoración médica de Morales, tal como lo ordenó el juez.
En la misma audiencia, la madre de la presunta víctima, Idelza P. S., fue declarada rebelde por no haberse presentado. Rocabado emitió una orden de aprehensión en su contra debido a su presunta complicidad en el caso relacionado con su hija.
El caso involucra una denuncia de abuso, presuntamente ocurrida en 2016, cuando Morales aún era presidente del país. La Fiscalía anunció que solicitará la detención preventiva del exmandatario, quien enfrenta una alerta migratoria.
La audiencia también estuvo marcada por un cruce de palabras entre el juez y el abogado defensor de Morales, Jorge Pérez, quien también solicitó la suspensión del acto judicial.
El proceso judicial sigue generando gran expectación, mientras la Fiscalía prepara nuevas medidas para avanzar en el caso.