La dirigente opositora venezolana María Corina Machado fue detenida este jueves en Caracas tras encabezar una manifestación en rechazo al gobierno de Nicolás Maduro. La aprehensión, confirmada a la agencia AFP por una fuente cercana a la líder política, ocurrió minutos después de su participación en el acto público.
El equipo político de Machado denunció en la red social X que la líder fue “violentamente interceptada” al salir de la concentración. Según el comunicado, efectivos de seguridad dispararon contra las motocicletas que escoltaban a Machado, aunque no se precisó si hubo heridos.
La detención se produce en un clima de alta tensión política, a pocas horas de la toma de posesión presidencial prevista para mañana. Tanto Nicolás Maduro como el opositor Edmundo González Urrutia han anunciado que asumirán la presidencia, aumentando la incertidumbre sobre el futuro del país.
Contexto de la protesta
La manifestación de este jueves marcó el regreso de Machado a la escena pública tras más de cuatro meses en la clandestinidad. La dirigente había desaparecido de la vida pública desde el 28 de agosto, cuando participó en una protesta en apoyo a González Urrutia, quien afirma haber ganado las elecciones presidenciales del 28 de julio. El Consejo Nacional Electoral (CNE), sin embargo, ratificó la reelección de Maduro, un resultado que la oposición califica como un “fraude”.
Rodeada de cientos de seguidores en Caracas, Machado reapareció para exigir transparencia electoral y rechazar la legitimidad del CNE. En una rueda de prensa virtual a inicios de semana, la dirigente había prometido intensificar las movilizaciones para lograr el reconocimiento del supuesto triunfo opositor.
Reacciones nacionales e internacionales
La detención de Machado ha generado una ola de condenas tanto dentro como fuera de Venezuela. Diversos sectores han señalado que este arresto representa un nuevo intento del gobierno de Maduro por reprimir a la oposición y restringir las libertades democráticas.
Sus seguidores han convocado manifestaciones en varias ciudades del país para exigir su liberación inmediata. Organismos internacionales y gobiernos extranjeros también han expresado preocupación por la creciente persecución política en Venezuela.
El arresto de María Corina Machado agrava la ya crítica polarización en Venezuela, que atraviesa una de las crisis políticas, sociales y económicas más profundas de su historia reciente. Su detención no solo representa un golpe para la oposición, sino que podría intensificar las movilizaciones populares en un escenario donde el país sigue dividido entre quienes respaldan al gobierno de Maduro y quienes exigen un cambio político.