Un operativo policial en El Alto descubrió a 51 ciudadanos africanos que iban a ser trasladados ilegalmente a Perú. En la acción, cuatro personas fueron detenidas como presuntos “coyotes”, mientras los dos buses utilizados fueron interceptados en la avenida 6 de Marzo.
La Fuerza Especial de Lucha Contra el Crimen (Felcc) informó que los migrantes, entre ellos ocho menores de edad y una mujer embarazada, eran transportados hacia Perú por la frontera de Desaguadero, con Ecuador como destino final.
Walter Sosa, director departamental de la Felcc, detalló que los aprehendidos tenían en su poder los pasaportes de los migrantes y coordinaban la operación a través de dispositivos móviles que fueron confiscados. “Estos ‘coyotes’ inducen y promueven este tipo de actividad ilícita”, señaló.
Los migrantes reciben atención médica y alimentación, mientras fueron puestos a disposición de la Dirección General de Migración. Según la Ley de Trata y Tráfico de Personas, el tráfico irregular de migrantes conlleva penas de 5 a 10 años de prisión.
El caso resalta los riesgos de las redes de tráfico humano, que utilizan a Bolivia como país de tránsito para fines ilegales, exponiendo a las víctimas a condiciones precarias y peligrosas. Las autoridades continuarán con la investigación para identificar más involucrados.