La Agencia Nacional de Hidrocarburos (ANH) desmanteló un clan familiar que operaba en el transporte ilegal de más de 2.800 litros de combustible en el Valle Alto de Punata. Durante el operativo, se descubrió una red organizada que utilizaba vehículos modificados y placas intercambiables para evadir controles.
Wendy Villarroel, directora distrital de la ANH, informó que en la vivienda del grupo delictivo se hallaron bidones, turriles y otros recipientes con combustible, además de vehículos equipados con bombas y sistemas de extracción clandestina. “Cada vehículo tenía placas adaptadas para ser intercambiadas y así evitar su identificación”, explicó.
Un técnico de la ANH detalló que la red utilizaba diferentes matrículas para abastecerse en estaciones de servicio y luego trasladaba el combustible a su vivienda, donde lo almacenaban y distribuían en distintos envases. “Usaban un dispositivo especial para extraer el combustible de los tanques y trasvasijarlo a bidones”, precisó.
Durante la intervención, las autoridades detuvieron a tres personas y confiscaron más de 20 placas, así como los vehículos involucrados en la operación ilegal. Los aprehendidos fueron remitidos a la Fuerza Especial de Lucha Contra el Crimen (Felcc) para su procesamiento.
Este caso evidencia los riesgos del contrabando de combustible, una actividad ilícita que impacta negativamente en la economía y la seguridad ciudadana. La ANH reafirmó su compromiso de combatir este delito y fortalecer el control del mercado de hidrocarburos en el país.