AP.- Corea del Norte dijo el domingo que su más reciente lanzamiento de prueba de un misil balístico intercontinental tuvo como propósito reforzar su capacidad de ataque atómico “fatal” contra sus adversarios y amenazó con adoptar medidas drásticas adicionales debido a las maniobras militares previstas entre Estados Unidos y Corea del Sur.
Como respuesta, bombarderos supersónicos estadounidenses de largo alcance volaron más tarde el domingo en un ejercicio conjunto con aviones militares surcoreanos como demostración de fuerza ante Pyongyang.
El disparo el sábado del MBIC, el primero de Pyongyang desde el 1 de enero, deja entrever que el gobernante norcoreano Kim Jong Un aprovecha los ejercicios militares de sus rivales a fin de ampliar la capacidad nuclear del país para fortalecer su posición en alguna posible negociación con Estados Unidos.
Según un experto, Corea del Norte podría estar considerando la realización regular de maniobras operacionales en las que utilice misiles balísticos intercontinentales.
La estatal Agencia Central de Noticias Coreana (KCNA por sus siglas en inglés), de Corea del Norte, dijo que el lanzamiento del MBIC Hwasong-15 se organizó “de súbito” sin previo aviso por orden directa del gobernante Kim Jong Un.
La KCNA señaló que el lanzamiento tuvo como fin verificar la confiabilidad del arma y la presteza de combate de la fuerza nuclear del país.
Alcance del misil
Agregó que el misil alcanzó una altitud máxima de unos 5,770 kilómetros (3,585 millas), y se desplazó unos 990 kilómetros (615 millas) durante un vuelo de 67 minutos antes de caer con precisión en la zona prevista en aguas entre la península coreana y Japón.
El lanzamiento se efectuó con un ángulo inclinado al parecer para no pasar por arriba de países vecinos.
Los detalles del vuelo hechos públicos por Corea del Norte, casi similares a las evaluaciones previas de los países vecinos, muestran que el arma es teóricamente capaz de alcanzar el territorio continental de Estados Unidos si es disparado en una trayectoria estándar.
El lanzamiento del Hwasong-15 mostró la “poderosa disuasión física nuclear” de Corea del Norte y sus esfuerzos para “convertir su capacidad de un contrataque nuclear fatal contra las fuerzas hostiles” en una tan poderosa que sea imposible de ser contrarrestada, indicó la KCNA.
La posibilidad de que Corea del Norte tenga un misil balístico continental portador de una ojiva nuclear continúa suscitando debates ya que algunos expertos aseguran que Pyongyang no ha dominado la tecnología para proteger las cabezas nucleares de las severas condiciones que enfrentan los cohetes a su reingreso en la atmósfera.
Corea del Norte asegura haber conseguido la tecnología para el reingreso del misil en la atmósfera.
El Hwasong-15 es uno de los tres tipos de misiles balísticos intercontinentales de Corea del Norte, todos utilizan propelentes líquidos que deben ser inyectados antes del lanzamiento y no pueden permanecer en los depósitos de los cohetes por periodos prolongados.
Corea del Norte pretende construir un MBIC de combustible sólido que tendría mayor movilidad y sería más difícil de detectar antes de su lanzamiento.